El diario de Noble publica una tapa doble, una de ellas en blanco, como “símbolo del silencio forzado” a raíz del bloqueo de los trabajadores de AGR. Marca “lesión a la democracia” y olvida lo que calló durante el golpe de 1976.
 

Clarín en su edición de ayer aprovecha las consecuencias del bloqueo por parte de trabajadores de la imprenta Artes Gráficas Rioplatenses (ver aparte) para posicionarse como el medio “paladín de la libertad de prensa” y presentar esta medida como una “lesión a la democracia”. De paso, trata de ligar la sombra del fascismo al gobierno.
Como recurso, el diario de Magnetto publica una tapa doble, la primera de ellas en blanco, con la salvedad del nombre de la publicación y la fecha.
Esta primera tapa contiene cartas de lectores, una contratapa con la habituales historietas del diario, pero referidas a “la no salida” del periódico, y un editorial. Allí, con el título “Un apriete para que no se hable de la corrupción”, se enfatiza: “No es una frase hueca. Mucho menos a 35 años del golpe del año ’76: la libertad de prensa es un presupuesto básico de la democracia. La democracia requiere del respeto de la libertad de prensa. Los fascismos, sean del color que fueren, persiguen el control de los medios y la manipulación informativa. El ataque de este domingo contra los diarios Clarín, Olé y La Nación es una lesión a la democracia. Y así lo ha interpretado la sociedad en  su conjunto.”
Resulta por lo menos llamativo que Clarín “recuerde” y “reivindique” que se cumplieron 35 años del golpe militar, luego de no darle lugar destacado en su tapa del viernes 25 de marzo, y hacer foco en el aumento de las cuotas de las escuelas privadas.
El diario de Noble demuestra a través de su historia que no necesitó tapas en blanco para silenciar un hecho.
Pues bien: los lectores de Clarín y la sociedad en su conjunto, cada vez en mayor número, conocen la tapa del diario de Noble y Magnetto del 24 de marzo de 1976.
Aquella vez, Clarín no utilizó una tapa en blanco. Ni tituló “una lesión a la democracia”, y menos “golpe de Estado”. 
El título elegido por Clarín para anunciar el desembarco de la dictadura más sangrienta que conoció la historia argentina fue “Nuevo Gobierno”. En la bajada, expresaba: “La prolongada crisis política que aflige al país comenzó a tener su desenlace esta madrugada con el alejamiento de María E. Martínez de Perón como presidente de la Nación. En las próximas horas asumirá el gobierno una junta militar…”. ¿Una presidente “se aleja” del gobierno, Clarín? ¿O es expulsada del poder con el uso de la fuerza por parte de un grupo de militares sediciosos? Ayer, desde la tapa hasta la página 19 inclusive, el diario fustiga contra el “nuevo ataque a la libertad de expresión”.
Esta vez, el diario de Noble y Magnetto no sólo amplifica un hecho y lo tergiversa. También pone en evidencia un doble discurso y una hipocresía que ya es histórica