"Vamos a conformar una agenda de puntos importantes que hacen a diversos aspectos de la relación entre los dos países" donde se tratarán "temas que van desde energía, gas, navegación en el río Uruguay, necesidades y definiciones comunes", señaló el mandatario oriental. También destacó especialmente que "necesitamos el apoyo de la República Argentina a para poder asegurar en términos económicos la interconexión eléctrica con Brasil".



"No pretendemos tocar el cielo con la mano de la noche a la mañana, pero pretendemos, pausada y decididamente, ir enfrentando esos problemas, con el espíritu más creador posible", afirmó el presidente electo.



Asimismo, evitó referirse al conflicto desatado por la instalación de una pastera a orillas del río Uruguay, al señalar que "tenemos que esperar el laudo que va a tener la Cote de la Haya" al respecto.

"No tenemos ninguna solución en la mano, pero tenemos la voluntad de luchar palmo a palmo para encontrar una salida y mejorar todo lo posible la relación entre los dos países", aseguró.

En ese marco, destacó que los negocios de argentinos en "la logística, el turismo y las inversiones inmobiliarias crecen día a día" y "para Uruguay son muy importantes dada la dimensión de nuestra economía".